Esta mañana tuve el privilegio de asistir a un evento organizado por Uvesco, como parte del equipo de Revista Alimentaria, invitado por la organización. Agradezco especialmente a su director y CEO, Fernando Martínez, por contar conmigo para vivir una jornada tan interesante como enriquecedora.
El encuentro tuvo lugar en un escenario singular: las instalaciones de la Real Sociedad, en San Sebastián. Antes de comenzar, los asistentes pudimos recorrer el estadio de Anoeta, ese templo del fútbol que, visto desde dentro, revela tanto el pulso de una afición como el orgullo de una ciudad.
“La fortaleza de una marca —como la de una región— se construye desde abajo, con esfuerzo colectivo y sentido de pertenencia.”
Tras el tour, un cuidado catering sirvió de punto de encuentro entre profesionales del sector, productores locales y representantes de distintas áreas de la industria alimentaria. El ambiente, distendido y cercano, permitió intercambiar ideas y visiones sobre el papel de la producción regional en un modelo económico cada vez más orientado a la sostenibilidad y la calidad.
Escuchar de primera mano a quienes forman parte de la cadena de suministro de una firma como Uvesco, que ha superado los 1.200 millones de euros en ventas, fue un verdadero privilegio. Son voces que rara vez ocupan titulares, pero que sostienen, día tras día, la estructura real del sector: el trabajo bien hecho, la constancia y el compromiso con el territorio.

“Son voces que rara vez ocupan titulares, pero que sostienen, día tras día, la estructura real del sector: el trabajo bien hecho, la constancia y el compromiso con el territorio.”
Cada testimonio, cada conversación, recordaba que la fortaleza de una marca —como la de una región— se construye desde abajo, con esfuerzo colectivo y sentido de pertenencia.
Fue, en definitiva, una jornada inspiradora. De esas que te recuerdan que el camino, en la empresa como en la vida, siempre es hacia adelante.
Nos vemos en los próximos encuentros.